13:56:00 Edit This 26 Comments »

Cuando la pobreza entra por la puerta,

el amor salta por la ventana.

26 lunáticos dicen:

Eria.. dijo...

Lo jodido es que no solo es una frase de una canción del último de la fila... ahora pondremos en los comentarios que lo importante no es el amor que es el dinero pero seamos realistas. Dar la felicidad no la da pero coñe, como ayuda.
Besitos varios.

Anónimo dijo...

Yo, como soy pobre, pues me quedo con la felicidad.

Lúa dijo...

la verdad que es una pena que estas cosas pasen, pero cuando se ven agobiad@s por las deudas, el amor falla, hasta que al final se va...
un beso!!!

Thiago dijo...

Pues algo de cirteo hay... Eso de contigo pan y cebolla no suele ser verdad en la vida real... desgraciadamente.

Bezos, cari.

Thiago dijo...

y YO le pondría título: "Contigo pan, cebolla y diamantes" o "Pensamiento profundo", o "Amor de saldo" o "Cuando me llevas al mercadillo te quiero menos" jajaaj

Bezos.

Lúa dijo...

amor de contenedor...jejejejejejej

josef dijo...

Uf no me hables de pobreza estoy fatal. Ayer hablé con una amiga colombiana y me contó la situación en la que estaba su familia y estoy muy deprimido, pero no puedo hacer nada porque yo estoy sin trabajo ja, o sea que quién esté bien que levante la mano! Un saludo1

Xoaniña Rosmona dijo...

Eso será que no es amor de verdad (uy!!que romanticona!!)

Alberte Momán Noval dijo...

o amor defenestrado. Ten instintos suicidas, a pobreza non é máis que a desculpa para fuxir de todo.

Charlieindio dijo...

La verdad muy real tu aseveración, solo pasa cuando las personas son todavia adolesentes, despues es casi un imposible, q triste no?
Abrazzzzzzzzzzzzzzzzzzzzo
Charlieindio
Bs As Argentina

- dijo...

Lo mejor es arrancar ya desde la pobreza , invitarla a cenar desde el principio para que el amor se vaya acostumbrando a compartir espacio con ella.

Carlos Sousa dijo...

Haberá casos e casos, eu penso que en momentos dados a pobreza axuda a estar máis unidos e tentar saír para diante. É que tamén se che falta o amor neses momentos, pois apaga e vámonos.
Non sei, o millor sou un bicho raro, como os do efecto óptico da foto.

BRILLI-BRILLI dijo...

Con dinero o sin dinero,siempre hay que ser feliz,o por lo menos inetntarlo,o intentar ser ricos...mecho mejor!
Besos desde Valencia

Ignacio Bermejo dijo...

ESTE JODIDO AMOR... QUE INTERESADO ES SIEMPRE. PRECISAMENTE ESTOY ESCRIBIENDO UNA NOVELA AL RESPECTO, SE TITULARA LA CORNUCOPIA.
UN BESO.

LM dijo...

o que passa que com a crise nom há muito onde escolher... assim que prefiro ajustar o cinto e manter o que tenho em casa :-D
beijos

Lúa dijo...

eu tamen penso que se hai amor de verdade, tense de loitar xuntos; tamén isto é verídico, mais se un ama e o outro non, cando a pobreza entra pola porta e as deudas...fin de todo o tema, mais "un" si ama...un bico.

Suso Lista dijo...

Neste mundo acual, así é, por desgraza.

abueloscrisytoño dijo...

No se que tiene el dinero, pero en este mundo de ahora siempre hace falta, tenemos el rumbo mal orientado.

Anónimo dijo...

hola preciosa, qué palabras tan cargadas de razón.
Un beso mi niña.

JESUS y ENCARNA dijo...

Y si siempre has sido pobre?... que no!!! que el amor es gratis!
lo que nos hace falta son los dineros, eso sí!!!
Petonetes i Bona Lluneta
Encarna

Raposo dijo...

En contraposición a esa frase esta estoutra: "Contigo pan e cebola".

X dijo...

Nestes tempos de tépedo "benestar" o amor non tarda en sucumbir ante calquera tipo de dificultade, incluídas as dificultades económicas. Saúdos.

CHOPINGO dijo...

Como ejemplo de pobresa:
Las cuotas pagadas por el cónyuge son un patrimonio familiar que, en forma de pensión, debiera pertenecer a la viuda; más del 65 por ciento viven en estado de pobreza.
Las pensiones de viudedad son una lacra que actualmente margina a un estado de pobreza a más del 65 por ciento de las viudas españolas. La pensión media de viudedad es de 497,37 euros mensuales, o sea una tercera parte de la pensión media general, y por debajo del umbral de la pobreza.
Además, aunque las cuotas pagadas por el cónyuge a la Seguridad Social no dejan de ser un patrimonio familiar del que después se deriva la pensión de jubilación, cuando ésta revierte en pensión de viudedad, al morir el marido, el Gobierno le retiene un 48 por ciento y ella pasa a cobrar sólo el 52 por ciento de lo que era la pensión del difunto.
Como muy bien plantea Carlos Barceló, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, en un artículo de opinión publicado en LA VANGUARDIA el pasado 24 de junio, cabe preguntarse “¿qué razón legal asiste al Gobierno para retener un 48 por ciento de este patrimonio?
Más de un millón de viudas pobres
Actualmente hay en España 7,2 millones de habitantes mayores de 65 años, la mayoría jubilados. De ellos, 3 millones son hombres y 4.2 millones mujeres.
Se calcula que el número de personas que reciben una pensión de viudedad son 2,2 millones de españoles, un 26,8 por ciento de los 8,2 millones de pensionistas. Con cifras del 2004, las mujeres representaban el 93,27 por ciento del total de beneficiarios de pensiones de viudedad, o sea algo más de dos millones de viudas.
Así, estamos hablando de 1,3 millones de mujeres (65 por ciento) que, a su condición de esposa que ha perdido a su compañero de toda la vida, ha de sumar la de una persona que mal sobrevive con el dinero que cobra.
Si se toma como referencia la pensión media de viudedad (497,37 euros), estas mujeres cobran un 34,8 por ciento de lo que es la pensión media general y su retribución está muy por debajo del salario mínimo interprofesional (SMI), de 570,6 euros, e incluso es inferior a lo que se considera el umbral de la pobreza (528,9 euros).
Les quitan casi la mitad
Por otra parte, en el proyecto de ley de Medidas en materia de Seguridad Social, que aprobó el Consejo de Ministros el 16 de febrero pasado, se aborda por primera vez desde 1978 una reforma de la pensión de viudedad.

Es de suponer que en esa reforma se revisen al alza las pensiones de viudedad, pero, mientras tanto, la pensión de viudedad vigente es del 52 por ciento de la de jubilación. O sea, que el Gobierno se queda con un 48 por ciento de la pensión que cobraba el marido de la actual beneficiaria.
Tal como argumenta Barceló en su artículo, la pensión de jubilación “es en sí una capitalización de las cuotas pagadas por el cónyuge, es decir, un patrimonio forzado por la legislación que ha de tener la consideración de bienes gananciales, pertenecientes al cónyuge sobreviviente en su totalidad”.
“No se trata, pues, de una gratificación estatal, sino de una parte del patrimonio familiar.

Azusa dijo...

Como te han escrito por ahí, será que no es de verdad...

Eva dijo...

No sé si salta el amor pero la billetera fijo y algunos van detrás.

Lúa dijo...

hola!!! graciñas por vuestros comentarios, esta semana voy fatal de tiempo, pero puedo prometer y prometo...que me pasaré en la medida de lo posible para visitaros a tod@s, que stress!!!!biqiños!!!!